miércoles, noviembre 16, 2011

Al pie desde su niño

Me detengo en Neruda, en este hermoso poema.


El pie del niño aún no sabe que es pie,
y quiere ser mariposa o manzana.

Pero luego los vidrios y las piedras,
las calles, las escaleras,
y los caminos de la tierra dura
van enseñando al pie que no puede volar,
que no puede ser fruto redondo en una rama.
El pie del niño entonces
fue derrotado, cayó
en la batalla,
fue prisionero,
condenado a vivir en un zapato.

Poco a poco sin luz
fue conociendo el mundo a su manera,
sin conocer el otro pie, encerrado,
explorando la vida como un ciego.

Aquellas suaves uñas
de cuarzo, de racimo,
se endurecieron, se mudaron
en opaca substancia, en cuerno duro,
y los pequeños pétalos del niño
se aplastaron, se desequilibraron,
tomaron formas de reptil sin ojos,
cabezas triangulares de gusano.
Y luego encallecieron,
se cubrieron
con mínimos volcanes de la muerte,
inaceptables endurecimientos.

Pero este ciego anduvo
sin tregua, sin parar
hora tras hora,
el pie y el otro pie,
ahora de hombre
o de mujer,
arriba,
abajo,
por los campos, las minas,
los almacenes y los ministerios,
atrás,
afuera, adentro,
adelante,
este pie trabajó con su zapato,
apenas tuvo tiempo
de estar desnudo en el amor o el sueño,
caminó, caminaron
hasta que el hombre entero se detuvo.

Y entonces a la tierra
bajó y no supo nada,
porque allí todo y todo estaba oscuro,
no supo que había dejado de ser pie,
si lo enterraban para que volara
o para que pudiera
ser manzana.

3 comentarios:

librakaur dijo...

un abrazo desde valparaiso...al parecer el sito esta en pausa...si vuelves avisa.

Anónimo dijo...

I am really admire the information which you shared here in your blog which is really good read to me.
TestKiller
CertKiller

javieraguirre50 dijo...

sinergia total, ayer me acordaba de este poema que tengo en un casete antiguo... gracias, me decidí a usarlo en la tesina que debo hacer para mi diplomado niñez y políticas públicas sobre el tema de los cabros condenados en los centros del Sename, soy periodista de este querido e incomprendido servicio...