sábado, abril 23, 2005

Feliz Día

En el marco de la celebración del Día Internacional del Libro y la Lectura, les recomiendo leer a Huidobro. Un poeta de lujo, muchas veces olvidado, muchas veces desconocido, pero cuyas letras impactaron detrás del océano, e incluso al otro lado del continente el gran Chaplín disfrutó con sus textos.

Los invito a leer el inicio del Altazor... pero les recomiendo que lo lean en voz alta o por lo menos moviendo los labios, así me enseñaron a leer la poesía y así la descubrí.

"Altazor ¿por qué perdiste tu primera serenidad?
¿Qué ángel malo se paró en la puerta de tu sonrisa
Con la espada en la mano?
¿Quién sembró la angustia en las llanuras de tus ojos como el adorno de un dios?
¿Por qué un día de repente sentiste el terror de ser?
Y esa voz que te gritó vives y no te ves vivir
¿Quién hizo converger tus pensamientos al cruce de todos los vientos del dolor?
Se rompió el diamante de tus sueños en un mar de estupor
Estás perdido Altazor
Solo en medio del universo

Solo como una nota que florece en las alturas del vacío
No hay bien no hay mal ni verdad ni orden ni belleza

¿En dónde estás Altazor?..."


Si desean continuar leyendo pinchen aquí.

viernes, abril 22, 2005

Protestar por protestar


Al parecer existe un problema de impulsividad en muchos dirigentes universitarios, que no logran quemar etapas de negociación ante los conflictos e inician de inmediato agresivas protestas. En Arica nos resulta habitual ver que se tomaron la calle, con piedras que van y vienen, protestando por no sé qué. También es común que algún grupo inicie una huelga de hambre que dura menos que una siesta, por motivos que también desconozco. Y finalmente me quedo con la bulla y el rock and roll y no con el mensaje que desean denunciar.

Hoy por ejemplo me golpea la imagen de Carabineros en llamas en Valparaíso, pues al prestarle una atención superflua a la noticia, mi retina retiene solo ese incidente, en yuxtaposición a ello, con los nuevos motivos para reclamar de los estudiantes que manifiestan su descontento tras ser castigados con trabajos comunitarios. Medida que a mi juicio es la más viable y sana, tanto para la comunidad externa a las universidades, como para los mismos estudiantes, quienes se verán obligados a sentarse a reflexionar y pensar en los distintos caminos que existen para realizar una denuncia.

Y sobre el nuevo Papa



La Iglesia:
¿Más cerca del cielo... más lejos del pueblo?

Patos malos



Para los de afuera de Arica, les cuento que el pato yeco es un ave que desde hace ya unos dos o tres años ha cobrado popularidad inusitada en Arica. Lamentablemente tiene fama de "pato malo", y es que no es para menos, pues hoy no hay árbol cerca de la costa que no tenga un nido, con la consecuencia que quien ose pasar por debajo del árbol, corre el riesgo de ser chorreado por el otrora apetecido guano. Otro punto en contra para este pajarito, es que su estiércol es tan fuerte que no solo mata el encanto de una dama al ser manchada por un pato en la cabeza, sino que además quema y mata al árbol, contribuyendo a la filosofía de muchos graffiteros que se empeñan en ensuciar y destruir la ciudad... pero en fin el pato no razona... los otros sí...mmm... ¿animalitos?... Por último, los yecos fueron esta semana portada de diarios y nuevamente el dedo acusador los persigue, esta vez bajo el cargo de dar el tiro de gracia, las bendiciones y dirigir el sepelio de un hotel de las costas del Chinchorro.
El control de esta ave está hoy en manos de las autoridades, esperemos que los resultados lleguen pronto. Que sea urgente. Pero mientras tanto, me detengo a reflexionar en la aparición de estos cormoranes en nuestra ciudad, que sumado a la plaga de moscas, las de jergeles y la de graffiteros, se transformará un rico material para quienes les gusta escribir la historia reciente de Arica con pañuelo y lágrimas y de seguro argumentarán “que el destino de Arica se ve ensombrecido y su crecimiento estancado por el flagelo de las plagas y el bla bla bla”... que de solo imaginarlo, se me hace un nudo en la garganta... mejor no sigo...

miércoles, abril 20, 2005

Arica hasta morir

Arica es la última ciudad en sumarse al mapa chileno, pero no por eso es una ciudad joven. Acostumbrados a celebrar cada 7 de junio otro aniversario más, oímos en los discursos de las autoridades- muchos de ellos orgullosos ariqueños- simplificar su historia a un poco más de 120 años, dejando atrás toda la riqueza milenaria que ha construido piedra a piedra la hermosa cultura en la que hoy vivimos.
Pero será acaso que esta tierra fue digna de llamarse ciudad al momento de ser chilena o solo es una percepción semántica que elaboran mis neuronas al oír los discursos que abundan cada semana ariqueña…Prefiero no jugármela por ninguna de las dos alternativas, para qué si ya no es importante, pues lo que realmente considero necesario es hacer una introspección a todo lo que nos ha forjado y entender que nuestra historia no empieza en 1880, sino que se remonta a miles de años; años que exigen ser reconocidos y asumidos como parte de nuestra identidad, de nuestro discurso y de la cotidianidad de la vida, para que no sólo se remitan a permanecer escondidos tras la vitrina un museo que también lucha por ser reconocido.

Inicie seción


Donde termina América existe un punto que marca el inicio de la senda final del mundo. Una tierra extraña, milenaria y multicultural. Un terreno yermo y ventilado por las brisas del mar que barren los techos de las viviendas que brotan frente a la costa. Es en este espacio de valles, ríos y cordilleras, que un día bautizaron como Arica donde doy inicio a este blog.
Soy Gerardo Espíndola y sean bienvenidos.